El Xacobeo quiere que el Camino de Santiago Portugués sea Patrimonio Mundial
El Comité Internacional de Expertos del Camino de Santiago del Xacobeo se reunió hoy en Coimbra para dar cuenta de la importancia jacobea de esta ciudad e insistió en la relevancia de que el camino portugués sea Patrimonio de la Humanidad.
El tradicional Camino de Santiago Francés fue distinguido por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad en el año 1993 y en 2015 también recibieron la misma distinción los cuatro ramales del norte de España: el Camino Primitivo (desde Oviedo), el Camino Costero, el Camino Vasco-Riojano y el Camino de Liébana.
Según explicó hoy a Efe el gerente del Xacobeo, Rafael Sánchez, de momento el Camino de Santiago Portugués ya figura en la Lista Indicativa de la UNESCO y ahora «lo que falta es que el Gobierno de Portugal defina cuál es el trazado de dicho camino».
Sánchez señaló que existen muchos ramales por todo el territorio luso y el Gobierno debe definir, basado en datos objetivos e históricos, cuál será el trazado, con el fin de presentar una buena justificación ante la UNESCO.
Por lo general, el Camino de Santiago Portugués se hace desde Lisboa, pasando por Coimbra, Oporto y Viana do Castelo, hasta llegar al sur de Galicia en España.
También hay un Camino Portugués de la Costa que forma parte del trazado.
En este sentido, los participantes explicaron la conveniencia de que cualquier gestión en torno al Camino de Santiago sea coordinada por Galicia y Portugal.
Sánchez manifestó que tienen una relación muy estrecha con los entes públicos Turismo Porto e Norte, Turismo Centro y Turismo de Portugal, con los que desarrollan acciones en torno al Camino de Santiago.
El gerente también recordó la importancia que tiene Coimbra en relación a la cultura jacobea, sobre todo por la reina Santa Isabel de Portugal (Zaragoza, España, 1271 – Estremoz, Portugal, 1336), que fue beatificada en 1526 y canonizada en 1625.
Tras la muerte de su esposo, en 1325, decidió donar su ingente fortuna a los más pobres y ese mismo año peregrinó en el mes de junio a Santiago de Compostela para ganar el Jubileo.
Fue entonces cuando se acabó de despojar de todo su halo de realeza al donar al Apóstol su corona de reina y su manto real con bordados de oro y plata.
A su regreso, Coimbra fue su ciudad elegida, ya que decidió retirarse al Convento de Santa Clara, que ella misma había fundado.
En este sentido, el Comité de Expertos, entre los que figura la profesora de Coimbra María José Azevedo Santos, mantuvo un encuentro con representantes de diferentes estamentos sociales de Coimbra, entre ellos la Iglesia.